Piensa en esta escena: estás teniendo relaciones sexuales con tu novio (o con tu amante, o con un rollo de una noche, o con quien sea) y te lo estás pasando bien. Reallllmente bien.

Al momento, después de su evidente climax, se deja caer sobre la almohada, feliz. Como es un amante generoso se gira hacia ti y te pregunta: “¿has terminado tu también?”.

Si eres una de las afortunadas cuyos orgasmos se parecen a los de las películas, que sólo con tocarlas ya están a mitad del recorrido quizá esta pregunta ni te haga falta.

En cambio si eres una mujer humana muy normal que necesita más estimulación de lo que tu pareja ha sido capaz de darte probablemente la respuesta sea un gran NO.

conseguir un orgasmo

O quizá ni siquiera sepas cómo has de sentirte cuando estás teniendo un orgasmo y no sepas identificarlo. ¿Cómo se puede saber si realmente estás teniendo un orgasmo?

Puedes estar teniendo un orgasmo y no eyacular al igual que puedes eyacular sin necesidad de haber tenido un orgasmo. Por eso vamos a hablar de algunos signos que demuestran que sí, que estás teniendo un orgasmo en ese momento:

No es tan difícil saber si estás teniendo un orgasmo

Los orgasmos no suelen parecerse a lo que ves en la tele o internet. No debemos olvidar que cada cuerpo es distinto y cada persona expresa de una forma diferente.

Que no grites locamente ni rompas la cama de pasión no quiere decir que no hayas tenido un orgasmo. Hay orgasmos intensos y orgasmos mucho más leves y desapercibidos.

Si todavía estás cuestionando si ese escalofrío o esa O que hacías con la boca eran síntomas de un orgasmo, no te preocupes. Esto pasa porque todavía no discutimos lo suficiente los diferentes matices del orgasmo femenino.

Hay una amplia gama de respuestas orgásmicas femeninas y cuando dudes lo único que tienes que hacer es informarte sobre ellas, como estás haciendo ahora.

Los signos físicos del orgasmo a los que debes prestar atención

No todas las mujeres llegamos al orgasmo de la misma manera. Algunas reaccionan a algún estímulo físico en particular, mientras que otras necesitan sentir confianza o conexión emocional además de las sensaciones físicas para poder llegar al orgasmo.

Estas son las señales físicas más comunes del orgasmo:

  • Tensar y liberar músculos: apretar la mandíbula o los dedos de los pies
  • Hacer expresiones con la cara y con la boca
  • Respirar muy agitadamente
  • Pequeñas contracciones en el área genital
  • Sensación de mucho calor en todo el cuerpo, sobre todo en la zona vaginal
  • Incluso perder por unos momentos el sentido de la realidad, como sorprenderte de dónde estás cuando abres los ojos.

Si nada de esto te suena no te preocupes. Hay mil formas de conseguir un orgasmo espectacular:  Averigua qué es lo que más cómoda te hace sentir. Puedes experimentar con un juguete sexual por tu cuenta o probar otras posturas con tu pareja/amante/rollo/quien sea.

Estas posturas que te propongo aquí son bastante eficaces a la hora de llegar al orgasmo:

1. La carretilla

Es un poco intensa pero estoy segura que te va a gustar. Apoya las manos en el suelo y ponte a 4 patas. Tu pareja te coge las piernas como si fueras una carretilla y te penetra. Además de disfrutar estarás trabajando mucho los brazos y los abdominales.

2. La vaquera y la vaquera inversa

Tu chico se acuesta o se sienta en la cama y tú te subes encima de él. Puedes hacerlo cara a cara o dándole la espalda (vaquera inversa) y puedes combinarlo con las piernas recogidas hacia atrás o con los pies apoyados en la cama y las rodillas dobladas, estilo rana, de arriba a abajo. En esta posición eres tú quien controla el ritmo y la intensidad.

3. El perrito a medias

Ponte a 4 patas en el borde de la cama y mientras mantienes las piernas en la cama baja los brazos hasta apoyar las manos al suelo. Yo te recomiendo que empieces con el perrito tradicional y a medida que vais avanzando bajes los brazos. No hace falta que llegues al suelo si no quieres, puedes encoger los brazos y acabar estando en una postura con el culete en pompa.

4. Piernas sobre la cabeza

Te acuestas sobre la cama mientras tu pareja te coge las piernas y se las pone sobre los hombros. Prueba al principio así y luego pídele que vaya acercando su cuerpo al tuyo manteniendo las piernas sobre sus hombros.

La mejor manera de disfrutar de un orgasmo es conocer tu propio cuerpo. Y no hay nada mejor que masturbarse para conseguirlo. Familiarízate con tus zonas erógenas como el clítoris y el punto G y ve descubriendo qué es lo que más te gusta. También puedes hacerlo con la ayuda de juguetes sexuales y vibradores.

Como cualquier otra cosa en la vida, sé paciente en eso de explorar tu cuerpo y descubrir que es lo que más placer te provoca.

Te prometo que la recompensa será muy placentera.

Te puede interesar: