Sí, necesitas una dieta. No es una dieta para perder grasa, o una dieta de sólo proteínas, y tampoco una dieta de comer pechuga sólo los miércoles. Es una dieta de medios sociales. Perderás peso sí, pero sobre tus hombros, y no sobre tus caderas. He aquí cómo hacerlo:
1. Deja de leer revistas y consumir otros medios que te hacen sentir fatal
Me puse a ojear una revista el otro día y os cuento lo que vi: hojas y hojas llenas de brillante publicidad de dietas. ¡Pierde peso en 2 semanas y prepárate para la playa!
Luego también había una lista de fotos poco favorecedoras de famosas y celebridades mostrando un indicio de papada o la sombra de una celutitis ridiculizadas simplemente por el hecho de ser humanas.
Estas revistas, programas de TV e incluso medios sociales nos venden auto-odio mientras idolatran la perfección, garantizando que invirtamos nuestro tiempo y energía en la cultura de la insatisfacción corporal, mientras seguimos creyendo que hay que estar delgadas siempre.
2. No te compares con las modelos que se ven en los anuncios
Es fácil creer que estas imágenes y mensajes no nos afectan, pero lo hacen. Diversos estudios han encontrado que influyen negativamente en la imagen corporal y autoestima tanto de hombres como de mujeres.
Incluso cuando entendemos que las imágenes no son reales, o que hay todo un equipo de profesionales detrás que hacen que las modelos y famosas parezcan impecables en portadas de revistas y en sus fotos de Instagram todavía juzgamos nuestra apariencia en contra de la suya.
3. Recuerda amar a tu cuerpo…y él te amará también
La insatisfacción con el cuerpo, el peso, el pelo, etc, simplemente nos hace sentir como una mi****. Cuando nos sentimos mal somos menos propensos a hacer cambios positivos en nuestras vidas. Cuando odiamos nuestro cuerpo no estamos motivados a alimentarnos bien, a participar en cosas agradables, a estar alegres.
Cuando hacemos una dieta para lucir de cierta manera y no para sentirnos de cierta manera estamos en riesgo de desencadenar el auto-odio y la vergüenza, una espiral descendente que puede costar años librarse de ella.
En cambio, cuando amamos y aceptamos nuestros cuerpos como son en este momento, nos sentimos inspirados y motivados a tratarlos con el respeto que merecen. Cuando somos conscientes de las cosas increíbles que nuestros cuerpos pueden hacer nos esforzamos por nutrirlos, nos aseguramos que están satisfechos y proveemos la salud y no la delgadez.
Ya no leo revistas nunca más. No tengo ni idea de cuánto peso ha perdido o ganado la famosa del mes. No podría decir qué nueva mamá se ha embutido en sus vaqueros ajustados – y ni me importa! El no saber libera la energía mental que necesito para seguir adelante amando y respetando mi impresionante cuerpo.
Valora tu cuerpo. Come alimentos que te gusten, te alimenten y te satisfagan. No consideres al ejercicio un castigo. Considéralo una alegría y no una tarea. Sólo tienes un cuerpo. Trátalo bien.
Definitivamente este es un buen articulo gracias ..